Iniciar y administrar una pequeña empresa requiere prestar atención a múltiples áreas de responsabilidad. Contabilidad, marketing, operaciones, ventas, servicio al cliente … y la lista continúa. Rara vez los emprendedores tienen el conocimiento y las habilidades para diseñar estrategias hábilmente para ejecutarlas con éxito por su cuenta. Para mejorar áreas de sus negocios y descubrir formas de agilizar los procesos, algunas empresas solicitan la ayuda de juntas asesoras.

Según Penny Pompei, mentora de SCORE y presidenta del Capítulo de Palm Beach, “Realmente es muy solitario estar en la cima, especialmente en la cima de una pequeña empresa. Se espera que seas todo para todas las personas, y aunque muchas personas tienen muchos consejos para ti, no comprenden completamente tu negocio ni siempre tienen en cuenta tus mejores intereses “.

Un junta asesora está formado por profesionales con experiencia en diversas disciplinas comerciales, que brindan asesoramiento estratégico para ayudar a un emprendedor a administrar y hacer crecer el negocio. A diferencia de tener una junta directiva, tener una junta asesora no obliga al propietario de una empresa a actuar según la orientación proporcionada. Los consejos consultivos ofrecen la oportunidad de obtener conocimientos de expertos sin la formalidad y estructura de un consejo de administración.

Beneficios para la empresa